Personería Jurídica - Resolución I. G. J. Nº 0001744 del 8 de noviembre de 2011

6 de octubre de 2011

Expedición Patricios y Marinos en Defensa de la Patria


El pasado lunes 3 de octubre, una vez finalizado el acto en que entregamos nuestras banderas en Rosario a los responsables del Proyecto ALTA EN EL CIELO, los Patricios de Vuelta de Obligado nos embarcamos en el buque ARA Ciudad de Rosario, una unidad multipropósito de la Armada Argentina que se encontraba fondeada frente mismo al Monumento a la Bandera.


Dábamos así comienzo a nuestra "Expedición Patricios y Marinos en Defensa de la Patria", planteada como un homenaje a nuestros hombres de armas de mar y de tierra que más de una vez combatieron juntos, como emblemáticamente lo hicieron en 1838 en Martín García y en 1845 en la Vuelta de Obligado y demás enfrentamientos de la Guerra del Paraná (1845-1846).


Nuestra expedición es una más de las que se desarrollaron en todo el país en el marco de la EXPEDICIÓN BICENTENARIO ARGENTINA 2010, y estaba prevista para ser realizada el 20 de noviembre del año pasado, como parte de la celebración del Día de la Soberanía, pero la trascendencia que el acto de ese día tomó, con la inauguración del nuevo monumento a los Héroes de Obligado (acto en el que los PVO tuvimos el honor de participar), obligó a que, por razones de seguridad, la misma fuera pospuesta.


Algunas de estas expediciones que cubrieron la totalidad de nuestras 24 provincias, y que también llegaron a nuestras Islas Malvinas, la Antártida y el Monte Everest (techo del mundo) tuvieron un objetivo deportivo, pero en otros casos los objetivos fueron otros, la mayor parte de tipo solidario o, como en el caso de la nuestra, histórico, pero todas, sin excepción, tuvieron un objetivo común, que fue el de dejar enterrada en el lugar elegido como meta una "cápsula del tiempo" conteniendo los SUEÑOS de los chicos de escuelas y jardines del entorno propio de cada expedición en lo que se refiere al porvenir de nuestra Patria y su gente, cápsulas que serán recuperadas y abiertas dentro de CIEN AÑOS por los nietos y bisnietos de estos argentinitos de hoy cuando celebren el Tricentenario Patrio, momento en que podrán comprobar hasta qué punto esos SUEÑOS se materializaron.


Nuestra expedición estuvo también integrada por representantes de la Agrupación Patricios Reservistas y de la Asociación de Granaderos Reservistas de la República Argentina, así como por dos suboficiales de la Banda Militar Tambor de Tacuarí del Regimiento de Infantería 1 Patricios y un pequeño grupo de amigos que siempre nos acompañan y colaboran con nuestra actividad.


Al abordar el buque fuimos recibidos por su comandante, el capitán de corbeta don Pablo Puglisi, quien nos presentó a los miembros de su tripulación, y poco después, y tan pronto como dejamos nuestros petates en los lugares en que nos alojaríamos durante la travesía, fuimos invitados a presenciar la maniobra de partida desde el puente de mando del mismo.


Unas horas después (alrededor de las 17.00), el buque se detuvo frente al Sitio Histórico de la Vuelta de Obligado, donde se habían reunido docentes y alumnos de la Escuela Nro.15 Coronel de Marina Juan Bautista Thorne, cuyos SUEÑOS llevábamos en nuestra "cápsula del tiempo" que dejaríamos al día siguiente al arribar a la Base del Área Naval Fluvial de la Armada Argentina, sita en Zárate.


Formados en la toldilla del buque, y luego de un toque de clarín, se leyó la proclama con que el general don Lucio Norberto Mansilla arengó a sus tropas aquel 20 de noviembre, y luego de un ¡¡Viva la Patria!! estentóreo se dispararon bombas de estruendo y se encendieron bengalas de humo azules y blancas. Mientras esto ocurría, los chicos de la Vuelta de Obligado, con sus manos en alto, nos saludaban desde la costa. El sonido de la sirena del buque indicó finalmente que ya era hora de partir, dejando atrás uno de los momentos más emotivos de nuestra expedición.


Al día siguiente el buque amarró en la Base Naval de Zárate, donde luego de desembarcar fuimos recibidos por su comandante, el capitán de navío don Rubén José López Franco. Acto seguido se realizó una formación junto al mástil, e hicimos entrega de la cápsula del tiempo con los SUEÑOS de los chicos de Obligado y un obsequio como recuerdo de nuestro paso por esa Base.


El CN López Franco decidió que la cápsula sea enterrada junto al mástil, adecuadamente protegida para afrontar los próximos cien años, lugar en el que se construirá un pequeño pedestal en el que lucirá una placa recordatoria que también llevamos en que se menciona el objetivo de nuestra expedición y el contenido de la cápsula, habiendo quedado convenido que para la inauguración del pedestal los Patricios de Vuelta de Obligado nos haremos presentes en Zárate acompañados por los docentes y alumnos de la Escuela Coronel de Marina Juan Bautista Thorne, de manera que los chicos tengan certeza de dónde han quedado depositados sus SUEÑOS.


Quedó también convenido que en fecha a decidir por nuestra Marina de Guerra efectuaremos un homenaje al "Sordo de Obligado", don Juan Bautista Thorne, en el lugar en que descansan sus restos en Buenos Aires.


Al caer la noche del martes 4 fondeamos en el Apostadero Naval Buenos Aires, dando así término a nuestra Expedición Patricios y Marinos en Defensa de la Patria.


Vale la pena remarcar que durante todo el viaje se vivió un ambiente de absoluta camaradería, y que nuestros Marinos se esforzaron por lograr (y lo hicieron) que los Patricios, Granaderos y demás amigos que los estábamos acompañando quedáramos comprometidos en un agradecimiento inmenso. Más allá de todo lo emocional y patriótico (incluyendo la proyección de un par de películas sobre el general don José de San Martín), también disfrutamos de amenas charlas, una guitarreada de antología y una mezcla de cantos y de cuentos graciosos que hicieron que deseáramos que el viaje hubiera durado mucho más.


Sin lugar a dudas, para todos los que tuvimos el privilegio de participar en esta "expedición" la misma fue una experiencia inolvidable, grabada para siempre en nuestros corazones. Vaya, pues, nuestro agradecimiento a las autoridades de la Armada Argentina por haber facilitado su realización, y en especial a los señores CN D. Guillermo Tibaldi (que nos acompañó desde el momento en que surgió la idea), CN D. Rodolfo Neuss, CN D. Rubén José López Franco, CF D. Luis Rafael Cortez y CC D. Pablo Puglisi, así como a toda la tripulación del ARA Ciudad de Rosario y al personal de la Base Naval de Zárate.


Un profundo agradecimiento también a las autoridades de nuestro Regimiento de Infantería 1 Patricios, y en especial a su Jefe, el Cnl. D. Claudio E. Pasqualini, al Jefe de Ceremonial, Tcnl. D. Christian H. Bonaventura y personal a su cargo, y al director de la Banda Militar Tambor de Tacuarí, Cap. Lic. D. Diego G. Cejas.


Queremos también hacer una mención especial por lo que hace a los dos integrantes de la mencionada Banda que nos acompañaron en el viaje, los cabos Franco N. Delmonte y Lucas Andrada, por su excelente colaboración, compañerismo y camaradería, quienes nos emocionaron y nos llenaron de orgullo tanto con sus toques de clarín como con sus magníficas interpretaciones musicales en las reuniones realizadas a bordo.

Sólo nos queda, finalmente, agradecer a los camaradas y amigos que nos honraron con su presencia. Son ellos el Tcnl. Ramón A. Ojeda Fuentes, quien gentilmente organizó los distintos ceremoniales, Víctor Romeo, Néstor Gliniecki y Gastón Ortiz Pereira de la Agrupación Patricios Reservistas, Salvador Grimaudo, Victorio R. Espósito y Oscar H. Raimondo de la Asociación de Granaderos Reservistas, al Lic. Martín Iglesias Rossi, director de Expedición Bicentenario Argentina 2010, a Guillermo Balmaseda y Carlos Alberto Llamazares, y a los doctores Arnaldo J. Sabatini y Mario J. Ochoa. ¡¡A todos, muchas, pero muchas gracias por acompañarnos!!